domingo, 14 de octubre de 2007

unexpected



ayer, un amigo con el que años atrás compartí un beso, vino de sorpresa a mi casa.
fuimos a caminar.
puso mi mano en su frente.
y me dijo que estaba más linda que nunca.

¿será?

martes, 2 de octubre de 2007

Luciana, la ajedrecista

Hoy día pase por la plaza Esteban Canal, conocido punto de reunión de ajedrecistas en el centro miraflorino, buscando a Luciana. No sabía nada de ella hace tiempo y tenía ganas de verla. Me había dejado un comentario en la entrada anterior y, al saber que me estaba leyendo, tenía ganas de escuchar sus comentarios. Pero no la encontré.

Conocí a Luciana hace unos meses, cuando aceptó amablemente ser mi tarea en el curso de Periodismo Deportivo que llevé el ciclo pasado. Así que para que la conozcan, comparto ahora la crónica que escribí sobre ella. Con ustedes, Luciana Morales.

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CAPTURA DE DAMA

Confiesa sentir amor por el ajedrez, pero ahora una pequeña camarita de video se ha convertido en su nueva pasión. Como si sus logros en este deporte fueran pocos, es también una destacada alumna de Ciencia Política y encima, habla un poco de chino. Luciana Morales Mendoza, la pequeña gran dama del ajedrez peruano.



Luciana Morales Mendoza, Maestra Internacional y actual tricampeona panamericana, es quizá la mejor mujer ajedrecista de nuestro país. Carga a cuestas 20 campeonatos nacionales, igual que su edad, además de un sinnúmero de palmares internacionales. Ha sido la primera peruana en la historia en clasificar a un mundial de ajedrez y en estos momentos su principal objetivo es alcanzar las dos normas que le faltan para ser, igual que el gran Julio Granda, una Gran Maestra Internacional, último escalafón de la Federación Internacional de Ajedrez. Pero todo eso, ahorita, parece no ser tan importante. Se sienta al lado de un chico y le pregunta cuándo subirá al YouTube, portal web que se ha convertido en todo un síndrome entre los cibernautas, el video que acaba de grabar. “Es que hemos hecho un programa piloto”, me explica, “algo muy espontáneo, muy casero. Edmundo traía la cámara, se ponía a filmarme y yo hacía una especie de presentación de todo el ambiente ajedrecístico y las personas, los personajes. A veces yo cojo la cámara también y me pongo a filmar las partidas. Nos hemos dado cuenta de que así podemos conocer más de otros lugares de la escena ajedrecística, por ejemplo podemos ir a los clubes de ajedrez de las universidades o los que hay en el centro de Lima. En realidad, ya me están convenciendo de que podemos hacer esto para presentar al medio ajedrecístico y para hacerlo más popular”. Luego de que Edmundo le confirma cuando estará el video disponible en Internet, Luciana alborota al resto de sus camaradas, todos hombres y más allá de la base 5, al pedirles sus direcciones electrónicas. Todos los señores empiezan a buscar entre sus papeles en dónde es que apuntaron el “imeil” que cada uno se creó hace un tiempo, cuando fueron todos juntos a una cabina de Internet miraflorina. Un papelito empieza a circular con varias direcciones. Emoción pura.

Luciana es una dama que se mueve con frescura en un mundo lleno de hombres. Reyes o peones, da igual, hombres todos al fin. Pero eso no parece importarle mucho. Aprendió a mover las piezas desde muy pequeña, animada por su mamá, compañera fiel de sus noches ajedrecísticas, pero empezó a tomarlo más en serio luego de un taller que llevó cuando era aún estudiante de primaria. Su profesor fue el MI Mario Belli y probablemente lo más importante que le transmitió fue su pasión por el ajedrez. “Me quedaba los dos turnos del taller”, cuenta, “las otras chicas huían. Es que cuando vas aprendiendo con alguien que es mejor que tu, ganas más. Ahí me fui enganchando con el ajedrez”.

Después de ganar la Copa Omega -fenecido torneo escolar que congregaba alrededor de 300 jóvenes ajedrecistas cada año- en 1997, a los 10 años de edad, su carrera ajedrecística se fue para arriba. Asistió a su primer Campeonato Panamericano en Brasil, en el año 1999, luego de coronarse Campeona Nacional Sub-16 y Sub-18. No consiguió ningún premio, pero quedó sexta. “Para ser una chica de 12 años no era tan malo, no?”, me dice, acomodándose los lentes. Sin embargo, al año siguiente volvió a asistir y desde ahí, cada vez que ha ido a este tipo de torneos, ha regresado con alguna medalla.



Dama de Mundo

“A más grandes metas, mejores resultados”, es una frase que Luciana me ha repetido más de tres veces. Acostumbrada desde pequeña a competir con rivales mayores que ella, ha logrado entablar una gran amistad con la GM argentina Claudia Mora, primera mujer latinoamericana en conseguir ese título. Este año, luego de coronarse Campeona Sudamericana Sub-20 en la ciudad de Buenos Aires y además conseguir la norma para ser MI, se quedó entrenando con Claudia por casi dos meses y fue su mano derecha para varios torneos disputados.

En el año 2000, jugó un Panamericano Sub-14 en donde obtuvo la medalla de bronce. Pero lo más anecdótico de este torneo es que fue ahí donde jugó la partida más larga de su vida: después de casi 6 horas pudo derrotar a una ecuatoriana y pasar a la siguiente ronda.

En Latinoamérica, Brasil y Argentina han sido los países a los que más veces ha ido. Pero también ha ido a competir a España, Francia, Grecia, Italia, Eslovenia, Noruega, Azerbaiyán (en donde fue a jugar un mundial Sub-20 con sólo 16 años) y Rusia, en donde se quedó dos meses entrenando, gracias a un convenio entre el IPD, la UNMSM (su actual casa de estudios) y la corporación Backus, empresa privada que viene apoyando la carrera de esta joven trebejista desde hace varios años. “Me mandaban siempre una caja de cervezas, cada vez que regresaba de un torneo. Para que celebre, me imagino. Pero un día yo les dije: ‘no me manden cajas de cervezas, a mi lo que me gusta es la Guaraná’. Y desde ahí me mandan Guaraná”. Otra muestra más de que Luciana no es una muchacha común.

“El próximo mes voy a jugar el Campeonato Zonal, que es un torneo que yo gané el año 2003, pero que no pude jugar el 2005, a pesar de que tenía que ir a defender mi título”, me cuenta. En esos años tuvo varios altercados con la anterior junta directiva de la Federación Peruana de Ajedrez, que ella prefiere no recordar. “En agosto viene el Campeonato Continental de Mujeres, que esta vez va a ser en Argentina. En el 2005, cuando fue en Guatemala, empaté en tercer lugar”.

Es inscrita a todos estos torneos por el IPD, ente responsable de solventar los gastos de inscripción, alojamiento, alimentación, visas, impuestos, etc. Suele viajar sola o acompañada de otros jugadores que también estén yendo al mismo torneo, pero afirma que lo mejor sería que el equipo viaje acompañado de un entrenador, gasto que el IPD no siempre puede solventar.

Dama estudiante

Su actual ELO es de 2199, pero espera subirlo en los próximos torneos. A pesar de su semblante tranquilo imagino que debe ser un gran esfuerzo organizar su vida entre la universidad y el ajedrez. Estudia por su cuenta con un entrenador que le ha puesto la Federación, al que ve 2 veces por semana. Aprovecha también el Club de Ajedrez de la UNMSM, donde estudia la carrera de Ciencia Política. “Hay mucho de semejante entre el ajedrez y la ciencia política, en el sentido de que puedes analizar mucho, hacer estrategias, evaluaciones. Más que como política, me gustaría analizar los hechos, los fenómenos políticos. Creo que muchos ciudadanos deberíamos actuar más como tales y preocuparnos de las cosas de la política, del país”.

El año pasado viajó a USA a jugar un torneo de chicas, organizado por Susan Pollgar, cuatro veces campeona mundial de mujeres y cinco veces medalla olímpica. Se coronó campeona del torneo rápido y quedó tercera en el general. La Universidad Técnica de Texas le ofreció una beca completa para ir a estudiar allá, posibilidad que Luciana aún está evaluando. Es que con San Marcos tiene una relación especial que no quiere perder. No sólo fue campeona del campeonato interno de ajedrez, sino que también el año 2005 fue elegida delegada de su base.

Dice que el entrenamiento ideal de un ajedrecista debería ser de 6 horas al día, pero no se atreve a confesarme cuántas es que estudia ella. Afirma que el secreto del ajedrez es ir perfeccionándose simultáneamente en cada una de las fases: apertura, medio juego y final. “Alguien que se considere fuerte”, relata, “tiene que dominar lo que es la técnica finales, pero los finales se pueden subdividir, a su vez, en varios tipos. Es una cosa amplísima. El medio juego es la parte más compleja, porque nunca va a haber una teoría, o una receta, no hay una fórmula mágica. En el medio juego es donde tienes que poner más tu creatividad para resolver los problemas que van apareciendo. Y todo esto, en realidad, es un devenir, un resultado de la apertura. Y hay muchas aperturas en ajedrez, hay tantas piezas, tantos cuadros para moverse, que cada manera de empezar eso es lo que te determina una apertura, un esquema. Entonces ahí ya tenemos un montón de cosas en cada etapa”, me explica. “Es muy importante que domines las aperturas, pero eso no te garantiza que vayas a ganar. Tu puedes conducir el medio juego maravillosamente, pero llegas a un final, y ese final te hace malograr toda la ventaja que tenías, de nada te sirve”.

Define su estilo de juego como tranquilo y estratégico. “Antes era más agresivo, más dinámico”, dice, “pero no siempre puedes ganar así. Hay momentos en que no puedes ganar como ahorcando a alguien, sino que tienes que salir con tu daga, con tu sable a ganar. Y de eso se trata también, de saber cuándo usar cada arma.”



Ve el ajedrez peruano con muy buenas perspectivas. Le emociona ver a niños de 6 años asistiendo a campeonatos panamericanos. Sonríe al contarme que Perú, como equipo, viene siendo campeón desde hace algunos años. “Eso también te da muy buena espina, te hace ver un panorama esperanzador”, me dice.

Boris Spassky dijo que “el ajedrez es como la vida”, a lo que Bobby Fisher respondió: “el ajedrez no es como la vida, es la vida misma”. Sólo Luciana entiende cuan definitorios han podido ser estos dos jugadores para su vida, y espera dejar huella en este deporte tanto como ellos. Jaque mate, Luciana.